En las oscuras tierras de Silvania, allí dónde se respira la
muerte, dónde el viento va acompañado por los agónicos lamentos de las antiguas
doncellas espectrales, dónde cenagales y
bosques putrefactos inundan un desolador paraje ya marchito hace tiempo, una
imponente fortaleza se alza.
Fue construida por el demente nigromante Harseilf bajo la
voluntad de su señor el conde Goroth. Harseilf
utilizó las artes oscuras para imbuir de magia sus paredes, por cada piedra que
se ponía una vida le era arrebata al mundo.
Y así, piedra a piedra y vida a vida, la fortaleza fue cogiendo forma, y son
ahora, las almas de los muertos los que defienden el macabro lugar de los
vivos.....